13.7.11

Madrid, el preservativo y el papa


Que el papa Benedicto se sienta ofendido por una campaña a favor del preservativo… O que alguien suponga que el pontífice va a sentirse herido por ello, es ser más papista que el papa. En fin, que eso sólo pasa en nuestro país.
A lo que voy: resulta que la empresa Publimedia, gestora de la publicidad de los autobuses de la Empresa Municipal de Transportes de Madrid, que depende, ¿sabéis de qué y quién?, pues del Área de Movilidad, que dirige Ana Botella) ha decidido vetar una campaña en favor del preservativo que se iba a lanzar con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud, organizada por Catholics for Choice, una asociación estadounidense, oh milagro, formada por católicos progresistas.

La imagen de la campaña era correctísima y mostraba a una pareja heterosexual sonriendo con un texto que decía: “Creemos en Dios. Creemos que el sexo es sagrado. Creemos en cuidarnos mutuamente. Creemos en el uso del preservativo. Gracias Papa Benedicto por creer que los preservativos salvan vidas”.

Pero, ay, a Publimedia le ha parecido que esta apuesta era demasiado agresiva para la sensibilidad del papa de Roma y Ana Botella ha estado de acuerdo: “Estoy de acuerdo  en lo que ha hecho Publimedia porque da un argumento razonable: que no quiere herir a algunos. Eso no quiere decir que a mí me hiriera o no, yo no entro en eso, sino que Publimedia no quiere hacer una campaña que pueda ofender a un número de personas que probablemente es elevado y que se podrían sentir molestas con la campaña”, ha declarado la Botella, como siempre, ágil de palabra.

A mí sí que me hiere que no den esta campaña. A mí sí que me duele todo lo que dice la iglesia católica integrista acerca de los homosexuales, del aborto y del sida. Y sin embargo a nadie, ni a Publimedia ni a Botella ni a los organizadores de la Jornada Mundial de la Juventud, se les ocurre pensar en mi sensibilidad que, creo, es la de “un número de personas que probablemente es elevado y que se podrían sentir molestas bla, bla y bla”.